Sin lugar a dudas, la finca y la profesionalidad de sus miembros fue lo mejor de la boda (después de la novia lógicamente). Todos los invitados nos felicitaron por la finca, que es maravillosa, la profesionalidad de los camareros, la comida, la atención… Lo que más nos gustó es que nos filtraron todo de forma que solo nos tuvimos de dedicar a disfrutar del momento, ya que ellos se encargaban de cualquier duda con los invitados o problemas. Sin duda, un 10 para esta equipo y esta finca.