Y llegó el día de tratar el fatídico tema del que ningún novio quiere hablar pero que se convierte prácticamente en una obsesión: la lluvia.
Desde que comenzáis este proceso eligiendo una fecha, hasta el día B, las condiciones climatológicas juegan un papel muy importante, demasiado importante en muchos casos.
Está claro que ningún novio o novia quiere que les llueva el día de su boda, pero hoy queremos daros 5 consejos para «quitarle un poco de hierro al asunto» y que podáis centraros en lo verdaderamente importante.
1.Elige la fecha que te guste, y lo que tenga que venir vendrá.
Siempre decimos esto de que «el tiempo está loco» y la verdad es que no nos falta razón. Puede llover en cualquier época del año, verano incluido, por lo que no elijas la fecha de tu día únicamente basándote en las condiciones climatológicas, porque no sabes las que van a ser. Ten siempre presente que la posibilidad de lluvia esta ahí, eso evitará disgustos de última hora acompañados de la frase «me caso en julio, el mes mas seco del año y me tiene que llover» , «qué mala suerte», «lo tenía todo pensado para que fuera al aire libre» y demás frases negativas asociadas a uno de los días más felices de tu vida.
2.Ten siempre previsto un «plan B».
Para mayor tranquilidad es imprescindible que el «plan B» esté totalmente controlado y que ello no te suponga un sobrecoste económico de última hora. Este «plan B» debe gustarte casi igual que el «plan A», es decir que no debe ser un salón o zona que no se identifique contigo ni con el estilo de boda que estás preparando.
3. Ve la lluvia como una oportunidad.
Si días antes de la boda la previsión de lluvia es alta, prepárate y sorprende a tus invitados. Desde un paraguas bonito, hasta unas botas de agua, o una cazadora de cuero, puedes aprovechar la lluvia para divertirte y tener unas fotos muy originales.
4. Avisa a tus invitados para que vengan preparados.
Vivimos en la era de la comunicación, pero quizá puedes tener un detalle con tus invitados y avisarles de alguna forma original para que vengan preparados para la ocasión. Si aparte preparas algún detalle para que estén más cómodos, te lo agradecerán mucho.
5. Todo es cuestión de actitud
Este es el consejo más importante de todos. Mantener una actitud positiva hará que disfrutes de tu gran día. Esa actitud se transmite también a los invitados, que se contagiaran de tu positividad y disfrutarán mucho más de la boda.